"Stromboli"

De comidas sigue la cosa...porque resulta que stromboli (o boli) es un plato italiano parecido a la calzone, además del titiritero desalmado que explotaba a Pinocho, y yo toda la vida de Dios creyendo que era la canción estrella de los años 90, vamos, ésa que cantada en "guachu guachu" dice más o menos así: "mai lof is candemornin, my lof is strombolis, mai lof is candepague, is can stromboli...de mor an mor, pipol yes de mor an mor....", el single de Gala. Claro, con razón llevo años pidiéndola a los DJ de todas las discotecas que piso y los tíos me miran y se ríen, asienten con la cabeza y los más considerados levantan el pulgar haciendo la señal de OK y yo como una tonta esperando toda la noche a que me la pongan...¡¡¡Ahora lo veo todo claro!!! Ya sabía yo que el "guachu guachu" era peligroso; aparte de cutre, pone en evidencia...menos mal que los pinchadiscos tenían menos idea que yo de inglés...(el que no se consuela es porque no quiere). Y bueno, por no hablar de Disney, para que luego digan que influye positivamente en la imaginación de un niño. Con 9 años ves Pinocho (o Pinocchio, como se prefiera) y te fijas en el gordo barbudo que come cebollas crudas: "Strombolis, el gran Strombolis, el rey de las marionetas" y la imaginación de un niño y su capacidad de asociación es muy poderosa. A los 15 años escuchas el super éxito del verano de Gala y ya está, te montas la película y luego te plantas en los 21 y sigues creyendo que la canción se llama "Strombolis". Menos mal, que "San Google" está aquí para ayudarme y tras varios intentos fallidos, entre los que se incluyen la búsqueda con las palabras "Strombolis the more and more, people get more and more what you are looking for desire" con operador boleano incluido, que dan como resultado 10 páginas en alemán, el santo me ha iluminado, sacándome de mi error. Resulta que la canción es "Freed from desire" y "strombolis" es "strong beliefs". Aunque bueno, supongo que ustedes ya lo sabían...
Diez meses en Newcastle finalmente han dado sus frutos...

CIA 1: "lo castizo" & "lo reflexivo"

El iluminador

Una definición tan sencilla y tan absurda como la que me ofrece nuestra ilustrísima Academia de la Lengua de la palabra “iluminador” (“que ilumina”) basta para darme cuenta de lo gilipollas que fui en gastarme 30 euros en un artilugio que en teoría, y reitero, en teoría, ilumina mi tez y hace de mi rostro una herramienta única de seducción, magnetismo, sugestión que hechice al género masculino... ¿Es que no recuerdas Elena que la belleza está en el interior? ..30 euros!!! 30 euros!!! en un iluminador de Ives Saint Laurent!!! (fonéticamente y más coloquialmente conocido como insanlaural, reproduciendo palabras de la señora de la tienda…Un iluminador sí, un iluminador que ya podría por ese precio iluminar mi alma, mi vida ¿no creeis? Además, es dificilísimo utilizarlo..vamos, que como no tengas un poco de maña o elegancia (como Carmensilla) al final terminas con unas líneas de un tono más claro que tu piel por toda la superficie de tu cara que recuerdan a los indios anasazi, vestidos y ornamentados para sus mejores galas..
Y reflexiono yo ¿por qué no reaccionar a tiempo en esta vida? ¿tan difícil es?..Hubiera bastado con salir corriendo…Pero no…De todas formas, déjenme queridos lectores que me justifique, que me exima de esta culpabilidad consumista que me está aturdiendo y enloqueciendo a la vez…¿no comprarían ustedes un iluminador? ¿no es bello el lexema “iluminador”? ¿no recuerda a lo celestial, a lo divino, a lo espiritual? Lo que no sabía ni esperaba yo es que un iluminador (que todavía no sé, si se me permite la ordinariez, como coño limpiarlo) no cambie mi vida ni me ofrezca la plenitud de la felicidad.
Habrá que intentarlo con un lápiz de ojos de 50 euros de Loreal.
Besos y palabras

“Lo reflexivo”

La "berenjena"

Siguiendo la tradición huertana del blog y para no herir sensibilidades escribo la siguiente entrada. Nuestro cafelito matutino de hoy ha sido revelador: jamás pensé que yo iba a sufrir la ira de "lo ordinario", y a la vez, para que vamos a engañarnos, "lo sincero". Esta mañana, mientas comentábamos la jugada del sábado, hemos ido reconstruyendo la gran noche, esa noche que pasará a la historia por las "Historias del Cranium", el San Simón de Jumilla y el ligue de Lola. Hasta aquí todo parece normal, pero no, tres míseras copas de San Simón fueron suficientes para que "lo ordinario" pasara a la acción, haciendo aflorar lo más soez de mis entrañas.

(Los datos sobre la ubicación temporal son orientativos)

[Tantra, 4 am.]
- "A mí el (píiiiiiiiiii) me pone palota"
[WHO, hacia las 5 am.]
-"Una berenjena, lo que le hace falta es una buena berenjena" (bis)
[5:15 am.]
-"Que te lo digo, una berenjena, lo que le hace falta es una buena berenjena"
[5:30 am]
-"¡Que follen, que follen!"
[6:00 am]
- "Porque follar es lo mejor que hay en el mundo..."

Sin comentarios.

Esta mini transcripción habla por sí sola. Y lo peor de todo es que mi "yo alcohólico" ha sido tan cabrón de hacerme esto a mis espaldas, ¡con todo lo que yo he hecho por él!. El muy cobarde, no ha tenido la decencia de recordarme las lindezas que soltaba. Ahora, eso sí, al menos sé que no estoy sola en esta espiral de ordinarieces, porque no podemos olvidar, y la cito porque viene al caso, la mítica frase sobre la que se sustenta este, nuesto blog, "si follas, cierra la puerta".

CIA 1: "lo ordinario"